domingo, 23 de octubre de 2022

UBUNTU: YO SOY PORQUE NOSOTROS SOMOS

Liderar se hace desde el corazón, desde el ejemplo, desde la actitud, desde la motivación... Dirigir se hace a través del trabajo, la planificación, la táctica... Y para ello hay que entender la realidad humano-deportista de las personas que gestionamos y las necesidades del juego al que jugamos. Lo explicaba muy bien Xabi Alonso en su presentación con el Bayer Leverkusen; el jugador necesita creer en sí mismo, no dudar de aquello que sabe hacer porque ya lo ha hecho antes, necesita creer en el trabajo del entrenador, necesita ver que mejora con ello, que crece como jugador y como persona, necesita saber para ello el por qué de las cosas, necesita ver que se mueven todos a una hacia el mismo objetivo aunque la aportación de cada uno sea diferente, necesita sentirse útil y ver que su trabajo repercute en el desarrollo del equipo... el talento y la habilidad es patrimonio de unos pocos elegidos y se les admira por ello; pero el corazón, el coraje, la voluntad y la actitud deben ser el santo y seña de todos y cada uno de los componentes del equipo porque a eso todos podemos llegar, se vuelve contagioso y puedo sentirme identificado con ello. No hay mayor talento que el corazón y la voluntad. 

Liderar, en palabras de Fito es: "como una señal que a todo responde. Y sin dudar me fui a un lugar, sin saber hacia donde. Y se llenó de mariposas todo el horizonte" 


Hace poco vi una película sobre un chef que intentaba, luego de un tiempo alejado de los fogones a causa del stress del trabajo, conseguir la tercera estrella michelín, máximo galardón en el mundo de la cocina. Se estrellaba, valga la redundancia, una y otra vez porque en el momento decisivo asumía erróneamente el papel de Gary Cooper en Solo ante al peligro, olvidándose de que era el equipo que lo rodeaba el responsable de poder estar en disposición de conseguir tan ansiada estrella. Cuando se olvidó únicamente de dirigir y lideró al equipo a la consecución del objetivo como había hecho hasta entonces, cuando fue consciente que no había nada que cambiar sino hacer exactamente lo mismo que les había hecho grandes, ahí lo lograron.

Pincha en la imagen para ver el trailer 

"Escucha, ojos míos, cuida lo que es tuyo, la base" Así comienza un libro sobre Pete "Pistol" Maravich que estoy leyendo. Así comienza las pretemporadas Gregg Popovich en la NBA con los Spurs de San Antonio, volviendo a la base con el bote, el pase, la técnica individual, preocupándose por conocer el elemento humano que tiene entre manos... forjando unos cimientos sólidos una vez más, sin cometer el error de pensar que ya están consolidados para subir un peldaño más en el rendimiento del equipo. Dice que de nada vale el trabajo táctico si no tenemos las herramientas para poder llevarlo a cabo. 

Popovich es un chef que trabaja con materia prima de cercanía y de temporada, es decir, aquí y ahora, sin enmascarar el sabor del producto, haciendo saber a sus jugadores qué se espera de ellos. Vivimos en la era de la inmediatez, lo queremos todo para ya, y en cierto sentido ha de ser así pero no porque tenga que ser ya, sino porque tenemos que vivir en el presente. Las habilidades se adquieren por aprendizaje y eso es precisamente lo que se hace en categorías inferiores, trabajo de base, de cantera, de aprendizaje. En estas categorías los chavales permanecen dos años y, cada vez más, me encuentro con que tienen asumido que su año bueno es el segundo, que el primero es de transición porque los "mayores" son... mejores. Quizá sean más altos y más fuertes, pero no necesariamente más listos o más rápidos y, por supuesto, tampoco mejores. Pero es el discurso que se les da y se lo acaban creyendo y asumiendo, con lo que el primer año en la categoría puede ser de estancamiento y probable desmotivación. "Tarde, quizá para empezar ya sea tarde. Quizá desde el principio fuera tarde, y solo lo supimos después" Fito.
Ojo que estoy hablando de una misma categoría donde la diferencia de edad es de tan solo un año, no de subir una categoría donde la diferencia podría ser de hasta tres.
Con el paso de los años y la madurez que van alcanzando los chavales, ellos mismos son quienes de saber quién debe jugar más y por qué. Y lo aceptan perfectamente por respeto a los demás componentes del equipo. Pero esa misma madurez, también les permite ver muchas otras cosas que no son todo lo correctas ni justas que debieran con el esfuerzo y dedicación que muestran hacia su deporte. Y sí, puede que para entonces ya sea tarde. 

El Efecto Pigmalion es un experimento en el que te dicen que los chavales con los que vas a trabajar son muy buenos en la tarea a desarrollar sin saber si en realidad lo son o no. El caso es que te crean unas expectativas altas y acabas tratando a los chavales conforme a lo que te han contado de ellos, por lo que se consiguen unos resultados muy aceptables. Los entrenadores del deporte que sea, no todos por supuesto, hacen esto mismo, creando expectativas al chaval pero sin trabajar lo necesario con él para llegar a ellas. Vamos, que te acaban contando "cuentos tan interminables, cuentos llenos de mentiras. Cuentos que sin darte cuenta, se te acaban enseguida" Fito. Sí, para entonces también será tarde.

Que daño ha hecho Luis Aragonés con aquello del: "ganar, ganar, ganar y volver a ganar" Probablemente se haya sacado de contexto y lo que se pretendía transmitir es que la actitud ha de ser la de no rendirse, pero es un mantra que se utiliza incorrectamente agudizando la urgencia de ganar cuanto antes y a cualquier edad. Es evidente que nadie juega para perder, excepto en la Formula 1 porque hay equipos que no van a poder ganar nunca -además de tirar la temporada a las primeras de cambio porque el coche no sirve y ya estamos "evolucionando" el de la siguiente. 145 millones de presupuesto a la basura- y en la NBA, porque así tengo una mejor opción en el draft de escoger al jugador franquicia que me salve los papeles... la temporada siguiente. 

¿Qué me decís de esa otra manera fantástica de aprendizaje del palo y la zanahoria? En mi opinión, lo de funcionar a base de palos no sirve.  Menos todavía cuando las cosas no van por donde se esperaba y  las zanahorias comienzan a escasear. En ese momento, parece que solo nos queda el recurso del palo a base de gritos, reproches y broncas que muchas veces podrían y deberían evitarse... los chavales dejan de arriesgar, van a lo seguro, se termina la creatividad, pensamos a corto plazo, matamos la motivación intrínseca propia de la actividad, dejamos de crecer y ahí se acaba todo... para entonces ya se nos habrá hecho tarde de co.....

Erase una vez una conversación verídica entre dos chavales amantes de su deporte/juego:
    - Oye, ¿qué tal con el nuevo entrenador?
    - Bufff! Grita mucho. Mira que a mí me gusta que me corrijan, pero que me estén gritando todo el tiempo lo llevo mal. En la siguiente acción ya voy acojonado.

Hay una frase del Corán que dice así: "sabed que la vida en este mundo no es más que un juego y un pasatiempo" Sea cual sea el juego al que juguemos, tiene que ser lo menos importante de todo aquello que es importante (recordad la realidad humano-deportista de las personas que gestionamos) si queremos que al final arraigue, se haga fuerte, duradero e importante de verdad. No puede ser una obligación alimentada a base de presión, sino una responsabilidad y compromiso aderezados con dosis de intensidad y extras de actitud y concentración. Hay que motivar a los chavales, que ya de por sí lo están, sorprenderlos cuando menos se lo esperen o cuando más lo necesitan con un simple y al mismo tiempo esclarecedor "bien hecho" o un "buen trabajo", alimentando su confianza desde el compromiso afectivo. No queremos zanahorias sino un cariño justo, honesto y merecido, un reconocimiento sincero que eleve su confianza "hasta el infinito y más allá", su buena disposición y sensación de pertenencia al equipo. Por supuesto que hay que hacerse merecedor del reconocimiento, al igual que el entrenador, que está ahí porque hay un equipo al que entrenar y no al contrario, ha de ganarse el respeto y la autoridad.


Es un pecado capital acabar con la ilusión de los chavales por la presión desmedida que podamos transmitirles a pesar de que demuestren estar preparados para ello. La carga mental puede ser altísima incluso para los que la soportan bien. La influencia que un entrenador puede ejercer sobre sus jugadores es enorme. Si es bueno, enseguida encontramos la verdad de las acciones, es esa señal que a todo responde. Si no es tan bueno hay que ser un poco terco, flexible pero terco, y pedir explicaciones desde el respeto, sin miedo a preguntar y hablar de las dudas que nos asalten. Mucho se habla ahora de los problemas de salud mental que emergen del mundo del deporte y las consecuencias asociadas a ellos, pero no se pone el énfasis en la prevención de sus causas, solo se ponen parches cuando el problema ya está ahí... tarde. Me da la impresión que el trabajo de los psicólogos en el deporte tiene su razón de ser en que, como te voy a meter presión para sacar resultados (llámese club, entrenador, entorno, patrocinadores...) vamos a darte unas pautas para lidiar con ello. ¿Y si bajamos el nivel de presión externa un poco? ¿Y si dejamos que el trabajo de los psicólogos se centre en problemas inherentes al deporte en sí mismo? Ayudemos al deportista a lidiar con las lesiones, con las enfermedades, con los períodos de baja forma, con las inseguridades que producen las dudas ante cosas que saben hacer pero no les salen siempre, no les quitemos la beca a las primeras de cambio... Alejandro Valverde se retira con 42 tacos, en una forma física envidiable y con dos años más de contrato. Dice su mujer que físicamente está fenomenal pero que el desgaste mental es enorme, que se come la cabeza cada vez que uno de sus hijos llega enfermo del cole no vaya ser que lo pille también... Alejandro Valverde. No me quiero imaginar a un chaval con la carrera todavía por despuntar.

Si alguna vez me hago entrenador de lo que sea, que no llegará el día porque los experimentos mejor con gaseosa y si es en verano con limón, gritaremos tan solo como los marines americanos: "Hurra!! Siempre Fiel!" Al juego que yo juegue no dejaremos atrás a nadie. Por supuesto que a los chavales hay que darles caña, pero siempre con criterio, sentidiño y con la responsabilidad que queremos para ellos, no la que queremos para nosotros. Debemos pensar que nuestros jugadores son todo lo buenos que son pero no todo lo buenos que pueden llegar a ser si hacemos bien nuestro trabajo, y como tales tenemos que trabajar con ellos. Y si el aprendizaje va lento se para, se explica donde está el error, que no fallo, y se sigue trabajando desde la motivación positiva y con la mesura necesaria. "Y a veces navegar, y a veces naufragar, pero siempre salir a flote. Aprenderás a ser guardián de todo lo que importe" Fito.

Cuando sea entrenador, tan solo habrá una cosa innegociable, la música en los entrenamientos y los desplazamientos. Por descontado Fito será una pieza clave en esa playlist con la que motivar a los chavales e instruirlos en la cultura musical.

Y busqué en el fondo del mar
en las montañas y en el cielo
la manera de hacer realidad mis sueños
Encontré en el corazón
el mapa de los sentimientos
ya lo ves, no estaba tan lejos.


Press Maravich era el padre y entrenador de Pete "Pistol" Maravich. Amaba tanto el baloncesto que odiaba fichar jugadores porque decía que eran ellos los que debían estar deseando pertenecer al equipo sin tener que ir a buscarlos. De hecho, nunca se preocupó de fichar estrellas sino de sacar lo mejor de aquellos jugadores con los que contaba. Todo aquello que hacía bien con los demás, lo hizo rematadamente mal con Pete, al que hundió en la miseria debido a la presión enorme y unas expectativas altísimas, que si bien lo convirtieron en un jugador extraordinario también hicieron de él un persona infeliz. El baloncesto era lo menos importante de las cosas importantes pero solo lo supieron después. A mí, que el deporte me llena y me ha dado mucho, me duele ver como chavales ávidos de aprender, amantes de su deporte y motivados por la actividad, lo dejan hastiados. Volvamos a la base, a lo que realmente importa ¡No puede ser tan difícil! 

Olvidémonos por un instante del resultado, centrémonos en el camino a recorrer que es más divertido cuando se hace en compañía y, a pesar de lo exactas que son las matemáticas, pensemos que no hay un número que mida la grandeza, la magia, ni la memoria de las experiencias que acumulamos cada día.





domingo, 16 de octubre de 2022

ESCUELA DE TRIATLÓN EN OUTES

Hace unos días me llegaba vía WhatsApp la foto que adjunto unas líneas más abajo. Algo me habían chivado ya pero, al fin se hace oficial la creación de una nueva iniciativa deportiva por lo que no puedo, ni quiero, dejar pasar la ocasión de mencionarlo y darle una pizca de difusión, contribuyendo en la medida de lo posible a engrandecer y agradecer el esfuerzo de los responsables.

Desde la Escuela de Piragüismo de Outes y con el apoyo del Concello se han animado a crear una sección de Triatlón, dando respuesta así a una demanda que en la localidad y alrededores, en mi opinión, faltaba por cubrir. Es evidente que la práctica del Tri y el Duatlón, en sus diferentes modalidades, ha ido en aumento año tras año. Los "Pro", "Élite"... los mayores vamos, son la punta del iceberg, son los que vemos en la carretera ya sea corriendo o pedaleando, o devorando largos en la piscina en invierno y en la playa en verano. Pero faltaba atender la base a la que dar ejemplo con todo ese esfuerzo y diversión... hasta ahora.

Cuando me llegaron las primeras noticias de la creación de la Escuela, me dice uno de los responsables: "una liada pero me gusta" Ah, cuantas iniciativas han visto la luz porque alguien se ha dejado liar una vez más y, después de haber sido de todo y de haber hecho de todo en el tri, ahora va a cerrar el círculo con lo que le faltaba, sí es que le faltaba algo, y se va a dedicar a mostrar como se juega a esto del Triatlón a los más pequeños. No conozco en profundidad los planes de trabajo, pero estoy convencido que el equipo humano de la Escuela no va a defraudar todo el interés, motivación y ganas que los chavales seguro van a poner. 

Yo vengo del atletismo y soy feliz con un camino de tierra por el que echar a correr y dar rienda suelta a mi pasión. Pero cuando las piernas se quejan de tantos kilómetros recorridos y tengo que espaciar las salidas, la bicicleta me permite llenar esos huecos. Y si un día llueve mucho y no apetece salir a correr o pedalear, siempre puedes divertirte mojándote un poco en la piscina. El Tri es para mí un refugio, es ese lugar donde soy feliz no una, sino tres veces.

Bienvenidas sean siempre iniciativas deportivas como esta porque el deporte es necesario y ha de estar presente en el día a día de todos como un pilar fundamental en el que apoyarse. Voy más allá y animo a las instituciones a participar de las iniciativas de los demás Concellos y sumar apoyos para facilitar la labor y el esfuerzo de aquellos que muestran en qué consiste su deporte para beneficio y disfrute de la sociedad en general. Cedamos instalaciones, calles de la piscina, de la pista de atletismo... hagamos accesible el deporte a los deportistas independientemente del nombre que lleve la Escuela si con ello satisfacemos una necesidad real de la población en general. Unamos recursos, sinergias, optimicemos las ayudas y colaboremos para que los deportistas tengan todas las opciones posibles.


miércoles, 14 de septiembre de 2022

SE LEVANTA EL TELÓN

Se levanta el telón y aparece en escena un nuevo curso. Un nuevo curso diferente en las formas en algunos casos (1° y 3°) pero en el fondo, la chicha, el contenido, que es lo realmente importante, muy similar a los anteriores, con aquellos pequeños cambios necesarios para que el proceso de aprendizaje sea más significativo.

Como os he trasladado en la presentación, en la materia de Educación Física lo más importante es el compromiso diario, el esfuerzo, actitud y participación con los cuales se encara la materia, independientemente de las capacidades de cada uno y de la consecución o no de los objetivos que nos marquemos, porque mientras nos estemos moviendo hacia ellos no tenemos de qué preocuparnos, no tenéis de qué preocuparos. Lo importante de los objetivos no es lo que conseguimos cuando los alcanzamos, que también, sino el camino por el que transitamos mientras los perseguimos. Y si al final no llego, la próxima vez que lo intente estaré más cerca. Y ese es el compromiso que os pido, que no dejéis de intentar las cosas solo porque no os veáis capaces en ese momento de conseguirlas. No olvidemos que estamos aquí para aprender. Los logros que alcanzamos raramente sobrepasan las capacidades que nos atribuimos a nosotros mismos en un momento dado. Cuando no nos vemos capaces de realizar una tarea me conformo con algo más pequeño, o directamente optamos por no intentarlo total, ¿para qué? Mi capacidad actual me está limitando. Pero si me marco un objetivo más alto y decido prepararme, quizá tampoco lo consiga, pero estaré más cerca de lo que estaba en un principio, me sorprenderé y me sentiré con más ánimos para seguir intentándolo. La recompensa no está en el resultado sino en el esfuerzo que ponga en la tarea. Los cambios, los grandes cambios que me harán mejor en un futuro no se producen de un día para otro, sino haciendo pequeños reajustes un día, y al siguiente, y al siguiente... al final crearemos hábitos que me harán crecer.


"Soñar todo el día está muy bien, y soñar en imágenes, mejor. Y si el futuro es muy atractivo, perfecto, porque al dibujarlo tiendes a ponerte en movimiento... pero si no te pones en movimiento, no tienes nada" Xesco Espar

Eso os pido, que nos movamos y a ver dónde nos lleva el camino.


VAMOOOSSSSS!!!!!

jueves, 30 de junio de 2022

PAU GASOL: LIDERAR CON EL EJEMPLO

En octubre de 2016 publicaba una entrada con este mismo título a raíz de un artículo del propio Pau en El País Semanal. Hoy, la entrada es nueva con motivo de una entrevista en Mujer Hoy, cuando Pau ya está retirado de su, digamos actividad principal y por la cual es tan conocido que es el deporte de competición, e inicia otra carrera, cambiando el medio para llegar al mayor número de personas. Y ya que estamos, también voy a utilizar como foto de inicio la misma que empleé en aquel entonces.


¿Qué forja una leyenda? ¿Lo qué alguien hace en vida o cómo se le recuerda después de muerto? Creo que no es la primera vez que lanzo esta cuestión en el blog y ahí la dejo para quien quiera darle una vuelta. 

Titular de portada de Mujer Hoy del 18 de junio

Xesco Espar, entrenador de balonmano del que ya he hablado anteriormente, dice que "hay que vivir un 15% en el pasado para ver de dónde vengo y qué es lo que me ha traído hasta aquí, siendo consciente que ello no me va a llevar más allá. Un 15% mirando al futuro para ilusionarme con aquello dónde quiero ir, y un 70% en el presente que es donde tengo que trabajar para poder conseguirlo y disfrutarlo mientras lo hago"

Pau Gasol ha entendido que la última canasta no importa, importa la siguiente, porque nada acaba, solo vuelve a empezar. Los valores que Pau atesora no se los ha dado el deporte. Los valores no los pone el deporte sino el deportista, que utiliza el marco de la competición para sacar a relucir aquello que le define como persona. La calidad de sus actos depende literalmente de la calidad de sus pensamientos, y Pau, siempre ha estado muy por encima del gran deportista que es.

Cuenta en esta entrevista que siente que puede dejar un legado mayor que el deportivo porque es persona por encima de todo con una responsabilidad enorme precisamente por haber sido el deportista que todavía es. Pau ya era persona antes de ser deportista. Fue persona mientras era deportista, hecho que le permitió alcanzar esos niveles tan altos de desempeño, y seguirá siendo persona ahora que ya no está en la élite. Deportista no es solo aquel que practica deporte al nivel que sea. Deportista es aquel que aprende de la victoria y de la derrota, el que acepta la derrota cuando el rival ha sido mejor, el que aplaude los grandes golpes del rival reconociendo los mismos como si fueran suyos, el que anima al contrincante cuando pasa por un mal momento, el que no se sube a la parra cuando las cosas van bien ni se deja caer a los infiernos cuando vienen mal dadas... al final, el deporte es un juego al que se juega y, si se te da bien, has de aprovechar ese don para ponerlo al servicio de los demás que es lo que hace un líder.

Sportingnews

Cuando a Toni Nadal le preguntan por algún rival de Rafa durante los torneos, lo primero a lo que suele hacer referencia es a la educación y al nivel de implicación en la tarea que tiene. Luego ya se mete con los aspectos puramente técnicos; si tiene buena derecha, el saque, forma física... pero de entrada habla de la persona. Me encanta, y denota lo que es importante para él y a partir de lo cual se puede empezar a trabajar. El partido que más me gustó de Rafa en el último Roland Garros fue en octavos contra Félix Auger Aliassime. Ni una queja por parte de los dos, aplaudiendo ambos los puntos del otro, nada de malos gestos, nada de raquetas rotas... solo el juego. Amazing!!!

En otro momento de la entrevista, le preguntan por lo qué querría enseñarle a su hija que todavía no ha cumplido los dos años: "espero saber transmitirle los valores que me inculcaron mis padres. Quiero estar preparado para saber cómo ayudarla a ser buena persona, que es lo que más me importa"

Recordáis aquel anuncio del Renault Clio, creo, cuyo eslogan era, "JASP, jóvenes aunque sobradamente preparados" Pau seguro que se acuerda precisamente porque ya no es tan joven. No te preocupes porque preparado estás. No digo que vaya a estar chupado, pero hace tiempo que caminas por la senda correcta en este aspecto. Los valores no se estudian, pero sí se pueden aprender si se transmiten correctamente... desde el ejemplo. Y en esto te puedo asegurar que, quizás tan joven ya no, pero sobradamente preparado seguro que sí. Aúnas esos dos tipos de líderes de los que hablas en tu libro "Bajo el aro"; líder de acción, con el ejemplo en la cancha de juego (que puede ser una metáfora de la vida) y líder emocional, con la palabra, porque es evidente que la calidad de tus pensamientos concuerda con tus actos por lo que debes sentirte satisfecho de la labor que has llevado a cabo siempre. Tu hija se sentirá orgullosa de ti y querrá estar a la altura del ejemplo de su padre. 

Esta preocupación que muestra Pau por instruir a su hija en el difícil arte de ser buena persona creo que, hoy en día más que nunca, es la mayor responsabilidad que puede haber, porque además de pensar en el planeta que vamos a dejar a nuestros hijos, que va a ser una mierda y es una tarea que teníamos que haber terminado para ayer, tenemos que pensar también en qué tipo de hijos vamos a dejar en él. 


Esta foto no os va a decir nada, pero sí tiene mucho sentido para mí porque es un pequeño gran gesto de una persona muy importante en mi vida. La constancia y la continuidad en las acciones, con fundamento siempre, son la base sobre la que construir el carácter de las personas. En palabras de Sabina, "prefiero la guerra contigo al invierno sin ti"


Este curso envié por Classroom un trabajo a mis alumnos en el que tenían que hacer una reflexión personal sobre una charla de Fernando Romay. En ella, Romay narraba sus comienzos en el baloncesto que fueron fruto de la casualidad y de que marcaba la diferencia con su estatura en aquella época, diferencia por la cual era tratado... diferente, raro. Pero encontró su sitio, aquel lugar en el que podía destacar y convertir su diferencia en virtud, amplificándola  a todo su espectro vital, no solo al ámbito deportivo. Y no lo hizo solo, sino merced a que hubo personas que supieron ver ese algo especial, escucharon sus inquietudes y creyeron en él antes incluso de que Romay creyera en sí mismo.
De entre todos los trabajos que me llegaron, hay unos cuantos cuya lectura es un placer por lo bien escritos que están y por el excelente contenido. Este es uno de ellos:

"No todos somos iguales. Existen pequeñas diferencias que nos convierten en personas únicas e irrepetibles, pero no por ello mejores o peores. Se trata de encontrar nuestro sitio en el mundo, de hallar aquello en lo que destacamos, y trabajar día a día con el objetivo de mejorar lo máximo posible. El deporte pone esto de manifiesto, y aporta una infinidad de valores que nos pueden ayudar tanto dentro como fuera de la pista: el compañerismo, el respeto, la gratitud... Es nuestro deber depositar la confianza necesaria para motivar y empujar  a los demás, y viceversa. Yo creo en ti"

"Es nuestro deber..." Que gratificante es oír hablar de deberes y responsabilidades cuando, de un tiempo a esta parte, lo habitual es oír solo una  larga lista de derechos que parece no tener fin.

Hay otro alumno al cual, después de leer su reflexión, junto con la nota del trabajo le mandé un comentario pidiendo permiso para utilizar un párrafo suyo en alguna entrada futura. Coincido contigo en que "la casualidad puede ser el motivo de descubrimiento de muchas cosas..." pero, tanto en tu caso como en otros que me he ido encontrando a lo largo de los años, después de haber compartido con vosotros la experiencia de aprender, la casualidad va a ser que no es el ingrediente principal de las personas en que os estáis convirtiendo.
Mi reconocimiento más sincero para todos ellos por lo que hacen y por cómo lo hacen, porque merecido lo tienen y es suyo, y si yo me lo guardo se pierde. Reconocimiento que ciertas leyes, obviando lo justo y llegado junio no hacen, premiando casi siempre al que no se esfuerza. Dice Xesco Espar que el motor de una persona son sus capacidades, sus talentos. Y el combustible que lo mueve, su motivación... 
Imanol Ibarrondo cuenta en su libro que la primera persona del presente de los verbos Creer y Crear se conjugan igual, "yo creo". Hay que creer en la personas para crear en ellas inquietudes, hábitos que las conviertan en extraordinarias. Yo, cada vez creo más en unos pocos y mucho menos en la gran mayoría. Pau Gasol, Rafa Nadal, marcan la diferencia en la pista de juego, pero lo que de verdad les hace especiales y diferentes al resto son la humildad, educación, empatía, esfuerzo, dedicación, respeto que demuestran por los demás, cualidades cada vez más difíciles de encontrar pero que en ellos es lo normal. 

"No pierdo el tiempo pensando en lo que pasará, vivir es urgente" Luego Pau matiza que "lo verdaderamente urgente es disfrutar de cada momento porque no sabemos lo que pasará mañana"

Urgente me lleva a hacer las cosas deprisa y corriendo, como pollo sin cabeza. "No sé cuanto tiempo habré perdido, vivo tan deprisa que se cae de los bolsillos" (Fito) Vivimos tan deprisa buscando un tiempo extra que nos olvidamos precisamente de eso, de vivir. Dejamos cosas atrás, otras directamente las tiramos y otras las guardamos para ver si más adelante, cuando tenga tiempo... Vivir no puede ser urgente, vivir haciendo las cosas correctamente sí. Vivir hay que vivir, así que ya que tenemos que hacerlo, ¿por qué no nos concentramos y esforzamos en hacerlo bien a la primera?

Y mientras pensamos en esta última cuestión os dejo una canción porque, al menos yo, con la música y el deporte pienso mejor. 

Gladys Knight, "Midnight train to Georgia"

Postdata: ¿Os imagináis a Pau Gasol con su 2,16 de altura y 2,29 de envergadura, metido en un Renault Clio de los de entonces?




lunes, 20 de junio de 2022

EMBRIO POR PINK FLOYD EN EL FINA STAMPA

¡Que noche la de aquel año! era el título de un programa de televisión presentado por Miguel Ríos allá por el 87 en el que hacia un repaso a la historia del rock. Vaya noche debió ser aquella, de un verano del 65, cuando nacía Pink Floyd como grupo en Londres. Y ¡que noche! la de este sábado pasado en el Fina Stampa con Embrio, banda noiesa que no pretende ser un grupo tributo que se limita a tocar partituras. 



Antón Horta, propietario del Fina Stampa y facilitador de oportunidades para que otros pongan su arte al servicio del público, en su dedicatoria al finalizar el concierto abogó por la música no enlatada sino vivida en directo, música que requiere de esfuerzo y dedicación, de horas de ensayo para complementar las diferencias de cada músico y hacer que suenen a una, encajando esas diferencias y haciéndolas virtudes en un lugar y a una hora en concreto (con la media hora de retraso de rigor propia de las grandes bandas, por supuesto) encontrando su sitio y haciendo partícipes a los allí presentes. La música en directo se vive en el presente pero su magia puede transportarte al pasado, a la niñez, a ese despertar musical, a esa hora después de comer antes de volver al cole con el magnetófono de casete tumbado en cama escuchando a los Dire Straits, Pink Floyd, Peter Gabriel, Van Morrison, David Bowie, BB King, Janis Joplin...

Ramón Moas, Manolo Mariño, Tono Lado... me vas a perdonar pero no te ponía nombre hasta que mis fuentes, gracias Vero, me ilustraron al finalizar el concierto. Me dejo para el final a Luis, "Yiyo", Sanmartín porque este es un blog de deporte y compartimos el amor por el atletismo. Y si podía haber algo que le guste más que el mejor deporte del mundo, este sábado noche, una vez más lo ha dejado claro. ¡Como disfruta con las baquetas en las manos! "aporreando" la batería y transmitiendo esa pasión que no se puede esconder cuando es verdadera.


Cuando un atleta está en forma y ves esa soltura en sus movimientos, esos apoyos firmes y los resultados comienzan a salir, se dice que está muy fino. Este sábado pasado, los componentes de Embrio, vaya si estuvieron finos deslizando una nota tras otra haciendo las delicias del público presente. Un lujo de concierto como bien dijo Antón, y un placer el haber tomado la acertada decisión de acudir con la familia. Mi hijo solo tiene 15 años y no contribuye demasiado a bajar la media de edad del público asistente, lo cual, lejos de ser malo, viene a demostrar que la gente con experiencia sabe de música y aprecia lo bueno, jejeje.

Dice Xesco Espar, entrenador de balonmano con varias Champions con el Barcelona que: "una vez proclamas algo luego cállate, actúa y deja que los hechos hablen por ti" En el Fina Stampa hemos pasado una velada maravillosa al calor de la música de Embrio, versionando y haciendo suyas las canciones de Pink Floyd.


lunes, 25 de abril de 2022

EL REMO OLÍMPICO EN LAS AULAS

El pasado viernes 22 contamos con la presencia de tres integrantes del Club do Mar Noia que nos acercaron al deporte del remo, más concretamente al remo olímpico, en una actividad que están llevando a las aulas de las escuelas e institutos para mostrar en qué consiste, las razones que les llevaron a impulsar su práctica en Noia y los beneficios evidentes en la salud que aporta un deporte que no tiene impacto articular en el cuerpo y que puede practicarse hasta bien entrados los años. Benito, Gabriel, y Brais nos mostraron las embarcaciones con las que entrenan y compiten y nos enseñaron la técnica correcta para remar que pudimos poner en práctica luego con los ergómetros, los mismos con los que recorren metros y más metros cuando las condiciones meteorológicas en Galicia no permiten salir a remar al líquido elemento. Una mañana instructiva, amena y muy divertida por momentos al ver las caras de "esfuerzo" de los alumnos dándole caña a los ergómetros. Gracias por la labor que lleváis a cabo. 


No creo que me equivoque demasiado si digo que uno de los problemas de los equipos que practican deportes colectivos en los pueblos y ciudades pequeñas, es lograr contar con la personas necesarias para poder cubrir las plazas que nos permitan competir. Otro tema ya sería el que todos se implicaran en la misma medida en la tarea, algo harto difícil pero que es factible de conseguir. Cuenta Benito que empezaron su andadura en el remo con las traineras, banco fijo, y que se cambiaron al remo olímpico, banco móvil, cuando no fueron capaces de cubrir las numerosas plazas que se necesitaban. De esa manera pusieron solución al problema y ampliaron su ámbito geográfico de competición que se limitaba, casi exclusivamente, al norte de España. Que os voy a contar de aquellos equipos donde, contando con las personas necesarias no cuidan al deportista, haciéndole pasar por situaciones inexplicables, circunstancia que les hace abandonar hastiados el deporte que comenzaron amando. Circunstancia esta última que, después de mantener conversaciones, ver la gente implicada en el montaje de la actividad y el "buenrollismo" presente, no es el caso que nos ocupa. 


Cuenta Benito que los evidentes beneficios para la salud del remo, como puede ser la cuestión del impacto articular más presente en otras disciplinas, hace que se vea a gente de edad avanzada practicando este deporte, lo que alarga su vida deportiva redundando en un nivel de vida más activo y satisfactorio. Dice además que hay personas que se pasan toda una vida persiguiendo un sueño y no terminan de alcanzarlo, y que hay otros que merced a su talento y motivación (variables que Xesco Espar dice que determinan el rendimiento. La motivación multiplica al talento) lo logran pronto, casi sin tiempo de asimilarlo. Se puso a él mismo como ejemplo diciendo que su mayor hazaña, cuantificada en forma de medalla, fue un bronce en un Campeonato de España. Pero nosotros sabemos, y por su manera de comunicar Benito también, que los mayores logros y satisfacciones practicando deporte no se cuentan por las medallas que metemos al saco sino por las experiencias que coleccionamos y los conocimientos que acumulamos con los años. Todo ello nos transforma en una especie de alquimista que convierte el bronce y las medallas de chocolate, que son deliciosas y que nadie os diga lo contrario, en diferentes metales de muchos quilates en el día a día de aquellos deportistas a los que tenemos la fortuna de poder enseñar, intentando conseguir el objetivo de que se tropiecen un poco menos de lo que nos tropezamos nosotros. 

Hoy conocemos un poco más del remo olímpico porque hemos tenido la suerte de que el Club do Mar Noia lo ha acercado a las aulas de nuestro centro y Benito ha sabido llegar a los chavales, generando conocimiento más allá de limitarse a transmitir información, síntoma inequívoco de que ama el deporte al que representa y ejerce de ejemplo tanto con la palabra como con su práctica en el campo de regatas.



viernes, 8 de abril de 2022

OTRA MANERA DE REMAR PARA SEGUIR REMANDO

Es evidente que el remo olímpico está en auge en Noia. Es evidente que la presencia de un diploma olímpico en los recientes Juegos de Tokyo, perteneciente al club de remo de la localidad, ayuda a que su deporte crezca en número de deportistas interesados en practicar. Pero nada sucede porque sí, y si algo es todavía más evidente, es la enorme labor de promoción y fomento del deporte del remo por parte del Club do Mar de Noia. Y entre las diferentes iniciativas que acometen, está la de llevar la disciplina olímpica a los colegios e institutos de la localidad, para mostrar a los alumnos en qué consiste e intentar interesarlos en su práctica diaria. 


Acostumbro a decir que los cambios hay que hacerlos cuando las cosas van bien para que sigan yendo bien. No se puede esperar a que las cosas vayan mal para cambiar lo que no funciona porque entonces ya sería tarde. Por eso este tipo de iniciativas, cuando quizás no se vean necesarias porque todo va bien, porque el número de deportistas cada vez es mayor atraídos, entre otras cosas, por los resultados conseguidos y no haría falta salir fuera para captar gente nueva interesada, me parecen fenomenales. Los resultados están muy bien y son un acicate perfecto para animar a gente nueva, pero no dejan de ser el reflejo de un trabajo bien hecho, trabajo del que, como casi siempre en los pueblos pequeños, unos cuantos encendieron la chispa hace años y siguen, con iniciativas como esta, manteniendo la llama viva. Y vuelvo a repetirme, nada sucede porque sí, nada sucede si alguien no pone empeño y compromiso en llevar las tareas adelante y con su ejemplo y buen hacer muestran a otros el camino a seguir. Los resultados pueden llegar o no, pero la satisfacción de haber puesto todo de nuestra parte para que tan solo puedan ser posibles es la mejor parte del proceso. Caetano Horta es diploma Olímpico. Lo es por talento, por trabajo y porque hubo personas que se involucraron en que se dieran las circunstancias necesarias donde talento y trabajo pudieran unirse y tomar forma. Precarias circunstancias muchas veces porque las instituciones solo suelen mojarse cuando los resultados acompañan.

Por eso, desde el departamento de Educación Física, no podíamos dejar pasar la oportunidad que nos brindan desde el Club do Mar de Noia de poder mostrar a los alumnos de primera mano, contado por los propios protagonistas, cómo se rema. Quién sabe, quizás salte alguna chispa que prenda con ganas en el ánimo de los alumnos. Desde luego ese es el objetivo. Y no, esta vez no es imprescindible saber nadar para poder llevar a cabo la actividad, jejeje. 

Nos vemos el día 22 de abril, a la vuelta de las vacaciones, en una actividad dirigida a todos los alumnos de la ESO.

lunes, 21 de marzo de 2022

DE LIBROS, SUEÑOS Y RECUERDOS

En la entrada anterior hablamos de un libro para mí muy interesante, y aprovechamos, como no, para adentrarnos en temas de valores, principios, actitudes... que ya sabéis que yo prefiero que sobren y no que falten. Hoy voy a hablar de dos libros a modo de introducción, para acabar haciéndolo de un tercero que leí durante los primeros meses de pandemia, y cuyo recuerdo viene por un artículo leído en la revista Gigantes del Basket 

"El sueño de mi desvelo" es un libro de Antoni Daimiel que, junto al desaparecido Andrés Montes, metían en nuestras vidas de madrugada un baloncesto que venía de más allá de los mares. Dice Marc Gasol en el prólogo del libro que, menos dormir, todo es posible. Dormir es de cobardes se diría después cuando las retransmisiones de estos partidos de la NBA causaban el desvelo de los sueños de miles de personas para alimentar otro tipo de sueños menos terrenales, pues las hazañas que veíamos a través del televisor no estaban a nuestro alcance. Al menos no al de todos, solo al de algunos talentosos jugadores como el propio Marc. Marc Gasol es un yogurín de los grandes, más parecido al primo de zumosol con 2,11 de altura. Digo lo de yogurín, a pesar de los 37 tacos que tiene, comparándolo con un "veterano" como yo, cuyos sueños se desvelaban desde mucho antes con Corbalán, Brabender, Luyk, Llorente, Iturriaga, Romay... Delibasic.

Fuente: Marca

Lo reconozco, soy del Madrid de baloncesto, lo que no me impide admirar a Villacampa, Andrés Jímenez, Epi, Sibilio, Margall, Arcega, Solozábal y tantos otros que nos hicieron disfrutar con el basket. Ah! como odiaba a Nacho Solozábal de lo bueno que era y lo mal que nos lo hacía pasar en los derbis con el Barcelona. Mis sueños, como podéis comprobar, eran más de andar por casa hasta que llegó Ramón Trecet en 1988 con "Cerca de la Estrellas", el primer programa orientado hacia el baloncesto americano, con el que abrió un mundo diferente a nuestros ojos y nuestra mente.

Hay una tienda de basket en Santiago de Compostela. Claro, te preguntarás: ¿solo de basket? Pues sí, solo de baloncesto y funciona de maravilla. Tiro libre, al frente de la cual están Pío y su mujer, unos locos del basket que siempre están apoyando cualquier tipo de iniciativa y fomentando su deporte, más allá y mejor que aquellos cuya función se supone es esa misma. Bien, al principio de la pandemia, tras el confinamiento, nos hicimos con dos libros y un muñeco de Kyrie Irving, por entonces en los Boston Celtics. Antes de tener el muñeco de Kyrie, ya habíamos adquirido el de Larry Bird, mítico 33 de los Celtics. De hecho, para entrar en la meca del basket de nuestra casa, allí donde se desvelan los sueños, has de franquear una puerta tras la cual ya sabes lo que te espera si quieres ver cumplidos tus deseos. Y si no lo sabes, ahora te lo explico. Larry lo tiene claro. 


En el libro "Cuando éramos los Mejores" de Jackie MacMullan, se narra la historia de Bird y Magic Johnson contada por ellos mismos. Dicen los expertos que el impulso definitivo para que la NBA sea hoy la mejor liga de baloncesto viene de la mano de estos dos magníficos jugadores, enemigos acérrimos hasta que el deporte por fin los unió cuando se dieron cuenta que no eran iguales pero tampoco tan diferentes.
Por aquel entonces, finales de los 70 y comienzos de la década de los 80, los Celtics eran considerados un equipo de blancos en una ciudad de blancos. Cuenta Cedric Maxwell, exjugador de los Celtics por aquella época, que "no había un solo negro que nos apoyase, ni siquiera en nuestra propia ciudad" Sin embargo, para Larry Bird, un blanco de Indiana, cuna del baloncesto y centro de actividades del Ku Klux Klan, el color de la piel jamás fue un problema. "Bird no era muy consciente del trasfondo racial. A él no le preocupaba de qué color fueses mientras cortases hacia el sitio correcto, controlases a tu hombre y te lanzases a por los balones divididos. Era un adalid de la igualdad de oportunidades: tanto daba si eras negro o blanco, iba a ir a por ti si no lo dabas todo"


Ese muñeco de Kyrie pasó a ocupar su lugar junto a Bird. Si Kyrie hubiera tenido la fortuna de coincidir en el tiempo con aquellos fantásticos Celtics de los 80, acabaría demostrando toda su valía una noche sí y otra también porque es un jugador tremendo, siempre envuelto en la polémica por decir lo que piensa pero sin pararse a pensar siempre lo que dice. Con Bird en el equipo, acostumbrado a zanjar las polémicas a su manera pero siempre en beneficio del colectivo, siendo un líder de palabra y también con su ejemplo en la pista, se le iban a acabar las tonterías por las cuales se ha perdido muchos partidos en los equipos por los que ha pasado. "Chaval! Si estás con el equipo, quiero actitud, intensidad, concentración... Ya puedes prepararte para bajar el culo, defender la línea de pase y darlo todo porque sino voy a ir a por ti". Con tonterías no me refiero en absoluto a su decisión de no vacunarse, que para eso vive en un país con libertad de elección, lo cual es un privilegio en sí mismo. Por cierto, en estos momentos no puede jugar los partidos de casa con los Nets porque en el estado de Nueva York no se permite jugar a los no vacunados, pero si puede ir a verlos sin ningún tipo de restricción, incluso sin mascarilla y rodearse de 15 o 20.000 aficionados. Aquellos que abogan porque Kyrie se vacune, con este tipo de tontos e incoherentes razonamientos, se están quedando sin argumentos. "Todo está muy claro pero no lo entiendo, ¿quién está ganando y quién está perdiendo?" Con esta cita de Fito aprovecho para asegurar que ni los unos ni los otros, solo pierde el basket. Dicen que hay una guerra en Ucrania, como si Ucrania estuviera tan lejos y no nos tocara de cerca . Todos lo tenemos claro pero nadie lo entiende y en este caso nadie gana, nadie, todos perdemos. Porque Ucrania somos todos y Rusia, excepto unos cuantos interesados y desalmados, también. 

"Quisiera salir de aquí e ir por ahí y decirle a la gente que está pasando. Esto no es una guerra étnica. Sé que me pueden escuchar. No soy un político, soy un hombre sincero que no sabe mentir" Mirza Delibasic. Vivió en primera persona la guerra de la antigua Yugoslavia porque no quiso marcharse de Sarajevo donde se encontraban aquellos que eran lo más importante para él, su familia y amigos.

En diciembre pasado se cumplían 20 años de la muerte de uno de los mejores jugadores de baloncesto de la historia, del cual no tengo demasiados recuerdos pero sí los suficientes como para otorgarle merecidamente ese adjetivo. Recuerdos, que si bien son pocos, se alimentan con los comentarios de otros grandes de la época, compañeros y rivales, despertando el interés por conocer más de un grande del deporte. Mejor, que tiene calidad superior a otra cosa de la misma especie o que sobresale en una cualidad. Mejor es un adjetivo que probablemente Mirza Delibasic no consentiría que se le pusiera porque, si en algo sobresalía de verdad, era en la calidad humana para con los demás. "La humildad no es ser discreto, modesto, sencillo, la humildad no es hacerse de menos, sino pensar menos en uno mismo para pensar más en los demás y ponerse a su servicio para satisfacer sus necesidades que no sus deseos" Imanol Ibarrondo. 


"A un amigo que además había sido uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto europeo. Y lo fue sin darse importancia, solamente con su mirada" Este es un pequeño párrafo del artículo de Piti Hurtado "20 años sin la mirada de Mirza Delibasic" en la revista Gigantes del Basket. Que importante hacer las cosas cuando nadie nos ve simplemente porque es importante para nosotros. Esto mismo lo hablaba con un amigo el otro día, un amigo de los que no se dan importancia pero están cuando la importancia de la ocasión lo requiere. Hacemos lo que hacemos porque nos gusta, porque nos satisface y no necesitamos que otros nos vean para sentirnos motivados o reconocidos. ¿Recuerdas Fernando? Hay una canción de Sidecars en la que colabora Carlos Tarque de Mclan, Dinamita, en la que dicen: "cien maneras de mentir y mil formas de pillarme... ¿cómo habré llegado aquí?" Creo que ya sabes por donde voy... ese compañero que llevas en la muñeca que nunca te engaña, esa bicicleta a la que tienes que dar pedales porque sola no anda, el postureo no va con los de la vieja escuela como nosotros. Oye, perfecta la canción para la guitarra. Ahí lo dejo, ya tienes deberes.

"Y por supuesto, las asistencias no recibidas, los pases no agarrados. Los momentos de falta de entendimiento, de no saber ofrecerse. Mirza imaginaba espacios que no eran bien ocupados. Sin esas pérdidas de balón, sin los errores no habría genios pasadores. Y que no falten nunca" 

Al leer el artículo de Piti Hurtado me vino a la memoria el tercer libro del que quiero hablaros, ese que llegó con el muñeco de Kyrie y una biografía de Ricky Rubio, y que me encantó, "Conversaciones con Mirza" de Juan Antonio Corbalán, genial base del Madrid de mis desvelos. Me encantan los libros que, sin ser autobiográficos del todo, utilizan la propia experiencia y las vivencias personales para adentrar al lector a un mundo en el cual puede sentirse un poco protagonista e identificarse haciendo suyas, o tomando como ejemplo, circunstancias personales del autor. Es evidente el gran recuerdo que Corbalán guarda de Delibasic, una amistad que trasciende el deporte y de la cual echa mano el protagonista del libro para jugar las cartas que la vida le va presentado. No hay manera mejor de recordar a alguien que tenerle siempre presente. 


viernes, 11 de marzo de 2022

LA PRIMERA VEZ QUE LA PEGUÉ CON LA IZQUIERDA

Probablemente leo menos de lo que me gustaría y acostumbro a hacerlo a última hora del día cuando ya estoy metido en cama. Cuando digo menos de lo que me gustaría no es porque me quede dormido, que también, sino porque las horas del día no dan para todo lo que a uno le gusta hacer y pospones cosas. Leer en cama me ayuda a despejar la cabeza ocupando la mente en otros menesteres que no sean los del quehacer diario y es un complemento perfecto cuando el trote o la salida en bici no han sido tan satisfactorios como me hubiera gustado, precisamente por no haber estado todo lo presente que debería en el esfuerzo al pensar en las cosas que me han ido pasando a lo largo del día. Por eso la lectura escogida es, casi siempre, digamos que ligera, fácil de leer. Bueno, el libro por el que aposté para ocupar ese espacio nocturno de tiempo no cumplía, o al menos yo así lo creía al principio, con ese criterio de lectura fácil pero me ha enganchado aún haciéndome pensar demasiado a esas horas de la noche.


A Imanol Ibarrondo lo descubrí siguiendo un hilo de Twitter. No sigo demasiado las redes sociales y no las utilizo. No las utilizo porque no tengo, y no tengo porque me asusta el tiempo que se pierde con todo ello. Sin embargo, antes si seguía por Facebook o Instagram a diferentes deportistas, pocos, hasta que fue necesario tener una cuenta para hacerlo. Ahí lo dejé. Mientras Twitter no me obligue a tener cuenta propia seguiré consultando esas dos o tres páginas que me interesan por la calidad de la información publicada. 

Me gustaría recalcar que, cuando empleo la palabra información, me refiero a  contenidos que te hacen pensar diferente y ver las cosas desde otro punto de vista que quizás hasta entonces no habías sido capaz de interpretar, aquella información que se transforma en aprendizaje y provoca un cambio en la manera de desenvolverte y comportarte. Todo lo demás es como esa paja en el ojo que te nubla la visión y en las redes sociales hay mucha paja. Y sí, eso también me asusta. 

En entradas anteriores ya he empleado citas de Ibarrondo. Es Coach deportivo, palabra que está muy de moda y queda muy chulo decirla pero que a mí no me gusta. Por eso, en una de esas entradas lo presentaba como: "Conversador y Motivador. Exfutbolista profesional, diestro cerrado que despertó a la Felicidad del Deporte y la Vida la primera vez que la pegó con la izquierda"

A medida que he ido avanzando en la lectura del libro he reforzado ideas que me rondaban en la cabeza, cosas que me preocupaban del mundo del deporte y sus implicaciones en la vida diaria. Me ha sido de gran ayuda comprobar que no andaba muy desencaminado en mi modo de pensar y proceder respecto a ciertos temas a los que no se les da la importancia que realmente tienen y que, si se dejan pasar, luego no hay marcha atrás porque se "queman" etapas de la vida que no vuelven. Y como siempre, no quiero dar a entender que mi posición y modo de pensar sean los buenos, tan solo me parece sensato y correcto.



La captura de pantalla que vemos aquí es una muestra de esas páginas de Twitter que brillan por la calidad, corrección y sensatez de la información publicada. Es gratificante escuchar y leer palabras como estas de una persona que vive de la victoria y el resultado pero que tiene claros los principios y valores por los cuales deben regirse las etapas de formación y también, por qué no, las etapas de competición adultas. 

"La plenitud es un acto radical y no es el resultado de tener todo lo que quiero o de alcanzar mis objetivos, ni tampoco necesito que se den todas las circunstancias que me agradan para sentirme pleno, sino que surge cada vez que me atrevo a ser valiente y actúo alineado con lo que realmente es importante para mí ante cualquier circunstancia que la vida me proponga" Los valores no los pone el deporte sino el deportista, que utiliza el marco de la competición para sacar a relucir aquello que le define como persona, la calidad de sus actos depende literalmente de la calidad de sus pensamientos. "Estos son mis principios; si no le gustan, tengo otros decía Groucho Marx ¿Alguien puede pensar que Rafa Nadal es cómo es solo porque juega al tenis?

"Si crecieras como persona y fueras mejor entrenador, ¿qué harías distinto? ¿Quién estarías siendo?
Sería un entrenador más abierto y disponible, menos distante, más sereno, más alegre, más presente, me sentiría útil, alguien que les aportara valor de verdad, mucho más allá de las cuestiones del juego, alguien que creyera en ellos y les hiciera sentir valiosos, a todos, no sólo a los mejores o a los que juegan, sería un entrenador que les transmitiría entusiasmo y confianza... ¡ahí sería la hostia!"

"Desde tu responsabilidad de entrenador/profesor/padre/jefe ejerces un rol de gran trascendencia social pudiendo influir positivamente y con gran impacto en la vida y el futuro de tus jóvenes deportistas. ¡No lo desaproveches! Deja de preocuparte tanto por ganar o perder, por ser famoso o reconocido y ocúpate  en merecer ser recordado por tus jugadores como la persona que les ayudó a ser mejores de lo que estaban siendo haciéndoles sentir valiosos, capaces y especiales"

Hay una cita, no sé de quién ahora mismo, que dice que "aquellos que tienen la capacidad de actuar, tienen la responsabilidad de hacerlo" Hay entrenadores (con esta palabra me refiero también a padres, profesores, jefes...) que en el proceso de formación de las personas que tienen a su cargo, las hacen pasar por situaciones inadecuadas con la excusa de  que eso mismo es lo que se van encontrar más adelante. A veces la vida es una mierda, pero no hace falta meterse de lleno en ella para saber lo que es. Podemos hacerle caso a Fito y Fitipaldis y "quedarnos en el aire para no pisarla o, si no nos gusta así, tirar de la cadena" O podemos ejercer nuestra responsabilidad como entrenadores y dotar a nuestros jugadores de los medios necesarios para que tomen las decisiones adecuadas en cada momento y circunstancia. Creer en mis jugadores no es una opción, es el único camino para que saquen lo mejor de ellos mismos. 

A veces en las conversaciones sobre deporte sale la típica pregunta de: ¿a ti que jugador del equipo te gusta? La pregunta suele ir acompañada por parte de la persona de un comentario con sus propias preferencias, las cuales suelen coincidir con los jugadores más sobresalientes del equipo. Ante esta cuestión, mi respuesta es que por supuesto que me gustan esos jugadores, pero me gustan más todavía aquellos que hacen lo necesario para que esos precisamente sean los favoritos de la gente. Y en los deportes colectivos nunca se puede jugar solo. No hace mucho visitamos a unos amigos y mi mujer le preguntó a su hijo, infantil de primer año en baloncesto, en qué puesto jugaba y si se lo había pasado bien en una importante y reciente competición que había disputado. Su respuesta fue que se lo había pasado muy bien y que jugaba de "banquillo izquierdo". Conocedor de la historia que hay detrás de su respuesta y sabedor también de su valía y valentía como jugador que no se amilana ante el reto de jugar con/contra chavales mayores, he de decir que me encantó su manera de describir la experiencia. Ya no solo lo que dijo, sino como lo hizo. En ocasiones, los de la izquierda del banquillo, son los jugadores que más me gustan por la profesionalidad que demuestran a pesar de las circunstancias, porque no se entrena cuatro días a la semana para eso y porque se está de sobra preparado para saltar a la cancha cuando el entrenador lo demanda.

Cuenta Ibarrondo que una cosa es el elogio fácil y gratuito que sale por la boca, y otra es el reconocimiento auténtico y sincero que sale desde el corazón cuando ves que alguien es merecedor de ello. Soy muy malo utilizando los emoticonos, prefiero las palabras. Así que, esperando que alguien me mande un gif de esos para meter en favoritos y poder usarlo la próxima vez, aquí dejo unos aplausos bien fuertes para celebrar no solo lo que haces sino quién estás siendo mientras lo haces. Saludos family!


En los tiempos que corren es un regalazo poder asistir como espectador a la fiesta del baloncesto que supone un partido de Liga Endesa. Y ya, si lo haces en buena compañía, entonces tiene un color especial. 

Ejemplar afición la del Betis de basket, ejemplar y respetuosa, animando a su equipo sin menospreciar ni insultar al rival. En pocas canchas se percibe ese nivel de conexión con el equipo y de respeto por el rival. Un placer, esa es la sensación que me queda y que espero poder repetir.

Para ir terminando tengo que mencionar al 44 del Coosur Betis. 7 años en el Obra, capitán del equipo, protagonista en la cancha... Pepe Pozas dio un giro a su vida y cambió Santiago por Sevilla. Algunos dirán que no juega mucho, pero ha encontrado en la izquierda del banquillo su lugar, de momento, para ayudar al equipo. Vaya si juega!! Lo ves calentar, arengar a los compañeros, con actitud positiva... un ejemplo que en mi equipo siempre tendría cabida porque la valía de un deportista como jugador y como persona no se mide en minutos, puntos o asistencias. 


miércoles, 12 de enero de 2022

ESOS DOS TIROS LIBRES DEL FINAL... ¿LOS FALLASTE O LOS FALLASTE?

 "El valor filosófico del deporte es el sacrificio y el esfuerzo que nos ayudan a construirnos como personas capaces de enfrentarnos a cualquier otro episodio vital"  Con estas palabras y muchas otras, relata y explica Toni Nadal como se forja el carácter y la personalidad de los deportistas, ayudándoles a tomar sus propias decisiones partiendo de una serie de valores y principios que trascienden el ámbito puramente deportivo. Bien, ahora nos vamos a ir al cine para descubrir como la pasión, el valor y la amistad a través de las palabras, la lectura y el deporte, pueden guiarnos y hacer que nos encontremos a nosotros mismos.

La manera más sencilla de identificar la película  de la que vamos a hablar, hubiera sido poniendo como título de la entrada el mismo que el de la peli, "Descubriendo a Forrester" Pero me he decidido por un diálogo entre los protagonistas porque, en mi opinión, resume a la perfección el mensaje que se quiere transmitir, que no es otro que ser uno mismo tomando nuestras propias decisiones. 

El argumento echa mano del estereotipo americano de chico negro con beca deportiva en escuela privada para blancos. Huyamos de esto y quedémonos con chico que quiere aprender, que tiene la capacidad y que tiene la actitud, pero no así los medios necesarios ni la predisposición de aquellos que sí podrían ponerlos, y que si lo hacen, es con intereses ocultos y recelos hacia su trabajo. Con todo este peso cargando en la mochila, encuentra a la persona que dará un giro inesperado a su vida, un viejo escritor hastiado de la vida cuyo único deseo concedido en el ocaso de la misma, sin él esperarlo, fue el de la amistad.

Es decir, chico atormentado por los fantasmas de su presente que amenazan su futuro, y escritor atormentado por los fantasmas de su pasado que no le dejan vivir el presente. Y es ahí donde se encuentran, en el presente, en el ahora, que es donde suceden las cosas extraordinarias.




Trailer Descubriendo a Forrester

"Esos dos tiros libres del final... ¿los fallaste o los fallaste?" Hemos sido, somos y seremos nunca gente corriente, ese es el objetivo que persigue William Forrester (Sean Connery) con Jamal Wallace (Rob Brown) que proteja y desarrolle aquello que le hace único y diferente de los demás, que en cada momento y situación sea capaz de observar y tomar las mejores decisiones posibles con lo que tiene, con lo que sabe, con lo que es... Crecemos y nos desarrollamos cometiendo errores que nos ayudan a mejorar aprendiendo de los mismos, e incluso a veces los cometemos conscientemente sabedores de que el camino que nos marcan los demás no es el que queremos recorrer porque se aleja de lo que somos. Valores firmes y sólidos que con esfuerzo y tenacidad me llevan allá donde quiero ir, no pueden desvanecerse al pasar la página, la meta no siempre está más cerca porque cojamos un atajo y desde luego nunca es tan satisfactorio. "Fallando" esos dos tiros libres del final demostró lo que Arthur Abbott (Eli Wallach) en "The Holiday" llama "Agallas", pero eso ya es otra película.

He dicho muchas veces que el conocimiento y el aprendizaje son continuos, que no entienden de edades ni de épocas y que van en las dos direcciones, que son recíprocos entre el profesor y el alumno, entre padres e hijos... el conocimiento es atemporal, el ser humano se reinventa cada día y toda experiencia enriquece de un modo u otro, incluso cuando no lo esperas. "Le ayudé a encontrar sus propias palabras empezando por algunas de las mías" "Buen amigo que me defendió cuando yo no estaba preparado para ello"

La canción "Stand by me" dice así: "no importa quién seas, no importa hacia donde vas en la vida, no importa el dinero o los amigos que tengas. En algún punto del camino vas a a necesitar a alguien que esté contigo" 


Stand by me

Blanca Portillo, en el último Telediario del año 2021, pedía al 2022 mas "Empatía" Ponerse en el lugar del otro, o por lo menos a su lado, pero nunca enfrente. Ponerse en el lugar del otro, o a su lado y recorrer una parte del camino con él.

Y si el camino os lleva por las Antípodas, en realidad un pelín más al noroeste de Nueva Zelanda, no olvidéis pedir una exención médica siguiendo los cauces normales. Con esto del coronavirus corréis el riesgo de que no os dejen entrar en el país porque, está muy bien que respeten y comprendan nuestras decisiones individuales, del mismo modo que está muy mal no aceptar las consecuencias de las mismas no respetando las decisiones y acuerdos de los demás, que a veces se toman pensando en el colectivo. Dice Imanol Ibarrondo que habría que desterrar en el deporte la palabra sacrificio. No hay sacrificios, sino elecciones. Y para que estas sean óptimas y correctas, en lugar de quejarnos tanto justificando nuestro comportamiento o resultado en la contienda buscando la más mínima excusa, que es aquello de lo que echamos mano cuando la responsabilidad no alcanza, hay que aprender a pensar bien e interpretar con sabiduría lo que sucede a nuestro alrededor. 

Hay un documental en Eurosport que si tenéis oportunidad no podéis dejar de ver: Roland Garros, Building the legend.  En la edición del torneo de 1983 que ganaría Yannick Noah, durante la semifinal que disputó Mats Wilander sucedió lo siguiente: en esa época no había ojo de halcón ni cámaras por todas partes que ayudaran a dilucidar si una bola botaba dentro o fuera. En el punto de partido que daría la victoria a Wilander, el juez de silla cantó bola fuera y Mats dijo que había sido dentro, que tenía que repetirse el punto. Fue honesto y con ello agradeció de alguna manera la labor de los árbitros que también se equivocan y el juego de su rival que no merecía perder de ese modo. Wilander explica que no podía dejar que el partido terminase así, tenía la oportunidad  de jugar una final más e intentar ganar una cuarta copa de los Mosqueteros (de esas que Nadal acumula 13) pero que no era la manera. Dijo que: "el legado que dejas no es si has ganado tres o cuatro Roland Garros, sino que es la manera en que te comportas en la pista y fuera de ella" Después de perder la final contra Noah, se fue a la discoteca donde se celebraba una fiesta en honor del campeón y festejó la victoria de su rival.

Mats Wilander demostró carácter, personalidad y una sabiduría absoluta para lo cual ni siquiera tuvo que pararse a pensarlo bien. Lo que si tuvo fueron las agallas necesarias para hacer lo correcto engrandeciendo el deporte que practica. Otros se escudan en los errores de los demás para excusar los suyos propios. Defecto de forma creo que le llaman.

"Egoísmo más descuido son la suma del principio de una nueva división" que dice Seguridad Social en una de sus canciones. Así me encuentro yo, dividido intentando pensar bien, y llegando a la conclusión de que para ser el mejor del mundo en un juego, no basta con jugar bien. Lo importante, para mí, es todo aquello que haces mientras juegas, lo que abarca además de al jugador, a la persona. 

Bueno, vaya "circo" que me he montado para hablar de una película. Puede que me haya desviado un poco pero creo que al final todo guarda relación. Y no podía dejar pasar el tema porque al final unos se encontrarán a sí mismos y otros quedarán retratados dándose de bruces con su realidad.